Escrito por Tracy Dion para Raw Instincts Magazine, octubre 2012. Traducción de Dolores Lara and Tamar Alverez, enero de 2014.
Industrializada o hecha en casa, enlatada o cruda, todas las dietas felinas balanceadas deben contener huesos enteros, o un suplemento que los sustituya. Desafortunadamente, las industrias de comida para mascotas empezó en los 80’s una campaña muy efectiva para desinformar a las personas. La campaña desprestigiaba la idea de alimentar a nuestras mascotas con comida para humanos y particularmente con huesos. Hoy en día, la simple idea de dar huesos a un perro o un gato, nos hace estremecer. Incluso muchas personas que se inician ellos y a sus gatos en dieta cruda, evitan dar huesos por miedo a lastimar a sus felinos.
Los suplementos son sustitutos muy pobres de las cosas reales, debemos hacer un esfuerzo para superar nuestros miedos y permitirle a los gatos expresar total y completamente su naturaleza de carnívoros.
¿Por qué es importante dar huesos enteros?
Nutrientes
Los huesos están compuestos de muchos elementos distintos, de los cuales entre el 65 y 70 porciento son calcio y fósforo. El calcio y el fósforo juntos forman un mineral llamado fosfato de calcio. El restante 30 a 35 porciento está constituido de colágeno (una molécula proteínica), y pequeñas cantidades de sulfato de condroitina, sulfato de queratina y fosfolípidos.
El calcio y el fósforo son críticos para mantener huesos y dientes saludables. Sin embargo, de entre todos los minerales, el calcio es el que se requiere en mayor cantidad; especialmente en gatos cachorros. Además de ser el calcio escencial para los huesos y los dientes, lo es también para diversas funciones en el cuerpo del gato, incluyendo la coagulación sanguínea, la contracción múscular -como el bombeo sanguíneo que hace el corazón-, la transmisión de impulsos nerviosos y la fuerza. Por si esto fuera poco, el calcio ayuda a los vasos sanguíneos a mover la sangre; y a liberar enzimas y hormonas, las cuales afectan a practicamente todas las funciones del cuerpo. Las hembras lactantes lo necesitan para producir cantidades suficientes de leche.
El fósforo es también muy importante, pero este se encuentra en gran cantidad en la carne.
Es extraño encontrar gatos alimentados con dietas altas en proteínas, y que presenten deficiencias en la cantidad de fósforo consumido.
La médula ósea está mayormente compuesta de grasa y sangre, y contiene aminoácidos y otros nutrientes de alta calidad. El cartílago adherido al hueso es aproximadamente 50% colágeno.
El colágeno es importante para diversos procesos corporales, y es el componente principal de la piel, los ligamentos y los tendones. Una adecuada cantidad de colágeno presente en la dieta, inhibe dolores en las articulaciones, mejora la elasticidad de la piel, y ayuda a que las fracturas de huesos y heridas de piel sanen rápidamente.
Dar estos nutrientes en su forma natural, es la manera más eficaz y fácil de garantizar una digestión óptima y una absorción completa de los nutrientes. Además, un hueso en las comidas, ofrece mucho más que sólo nutrientes.
Salud dental
El que un gato coma huesos enteros, le ofrece beneficios insustituibles para su salud dental. Las enfermedades dentales en los gatos han alcanzado niveles prácticamente epidémicos – se estima que más del 85% de los gatos mayores de tres años, padecen alguna enfermedad periodontal – y esto tiene otras consecuencias graves en su salud. Las toxinas y las bacterias presentes en la boca, viajan a través del flujo sanguíneo, suprimiendo el sistema inmune y afectado los órganos; especialmente el corazón y los riñones. Cuando los dientes se pudren causan un dolor intenso que puede pasar desapercibido durante meses, incluso años. Entre el 30 y 40% de los gatos adultos, sufren de una condición llamada resorción dental, en la cual los dientes son destruidos
gradualmente. Muchos otros gatos están infectados de estomatitis felina, un desorden autoinmune que produce una inflamación en los tejidos de la boca y garganta, la cual es extremadamente dolorosa.
Una dieta que incluya tirar y rasgar carne cruda, huesos y tendones, ofrece suficiente estimulación para mantener la boca de un gato limpia y sana. La resistencia de estos alimentos aumenta el número, la distribución y el tono de los vasos capilares de las encías; mejorando con esto el metabolismo y vitalidad de la boda del gato. El tener que raspar los huesos, músculos y tendones, mantiene los dientes limpios y previene la acumulación de restos en los dientes, lo cual a su vez previene la formación de gingivitis y enfermedades periodontales.
Una dieta que incluya huesos enteros es la forma más eficiente de prevención de enfermedades dentales, y puede incluso revertir algunos daños, y restaurar la salud de la cavidad oral. La alternativa a esto es el cepillado diario de los dientes, algo que la mayoría de los amantes felinos encuentra estresante para sus gatos, y riesgoso para su propia salud.
Salud mental y digestiva
El simple acto de desgarrar la carne y los huesos, desata una reacción fisiológica que libera, en el sistema digestivo del gato, una combinación altamente eficaz de enzimas. Esto, combinado con el tiempo que requiere para terminar su comida, promueve un mejor proceso digestivo. Los gatos asimilan sus comidas de forma más eficiente, ya que cada parte de lo que necesitan para nutrirse, lo están absorbiendo directamente de sus alimentos.
Evidencia anecdótica sugiere que el hecho de que el gato se comprometa de esta forma al comer, tiene distintos beneficios psicológicos. Incluyendo la satisfacción inherente que se obtiene al cumplir correctamente los retos físicos y mentales–comer se vuelve un trabajo. Los gatos alimentados con una dieta que contenga trozos de carne y huesos enteros, parecen ser más tranquilos y menos propensos a la agresión y al descontento.
Riesgos
Ningún acto en la vida está libre de riesgos. Ofrecerle a tu gato huesos enteros, no presenta mucho más riesgo de asfixia, que ofrecerle croquetas (pienso). Los huesos crudos son suaves y flexibles, y es poco probable que un gato se atragante con ellos. Los gatos evolucionaron para comer animales, con huesos incluidos, y la mayoría de ellos saben instintivamente cómo hacerlo.
Si cortamos en pedazos pequeños las costillas de pollo, u otras carnes con hueso, y se la ofrecemos así al gato, estos trozos pueden en ocasiones quedarse atrapados en el paladar, o irse por la garganta en la posición incorrecta. Los gatos sin experiencia pueden tratar de tragar un trozo de comida demasiado grande. Si ocurre que un trozo se queda en el paladar, el gato tendrá que desprender el alimento; si un trozo se va por la garganta en la posición incorrecta, el gato regurgitará lo que trató de tragar. Ambos problemas pueden evitarse si se ofrecen piezas que sean demasiado grandes como para que las traguen de un sólo bocado. Eso obligará al gato a cortar la comida en trozos que pueda tragar fácilmente.
Puedes evitar el astillamiento o rotura de dientes si alimentas sólo con huesos delgados y que no soportan peso. Piensa que deben ser huesos como los de un ratón, pájaro o conejo pequeño.
Una regla general para el tamaño o densidad ósea correctos: si no lo puedes cortar con las tijeras, no se lo des a tu gato.
Por supuesto, nunca, nunca, nunca alimentes a tu gato con huesos cocidos.
Transición
La dieta natural de un gato doméstico consiste de, aproximadamente, entre el 5 y 7% de huesos enteros: más o menos el 5% del cuerpo de un roedor es hueso, las aves menos del 5% y los conejos poco menos de 10%. La mayoría de los que alimentan con dieta cruda recomiendan dar entre el 5 y 10% de huesos.
Siempre deja carne en los huesos. Así es como los huesos se encuentran en la naturaleza, y así es como debes ofrecérselos a tu gato. Esto lo estimulará a comer la carne, y facilitará el movimiento del hueso al ser tragado.
Para hacer la transición, empieza con huesos muy pequeños, como las costillas y alas de una gallina cornish, o los de media codorniz. Nótese que se sugieren huesos pequeños, no trozos pequeños de huesos. Los gatos que toda la vida han sido alimentados con comida industrializada, deben aprender a usar su mandíbula, y sus dientes; tienen que fortalecer su mandíbula para poder desgarrar. Los gatos se desaniman fácilmente, por lo que tienen que empezar con los huesos más fáciles de comer.
Has la transición lentamente, durante un par de semanas, para darle tiempo al sistema digestivo del gato a adaptarse. Si tu gato vomita huesos o encuentras un poco de hueso en las heces, reduce la velocidad de transición.
Una vez que tu gato se sienta cómodo comiendo huesos pequeños, puedes ofrecerle costillas y alas de pollo. Estimar la cantidad de hueso que un gato debe comer puede ser difícil. La regla de oro es, si alimentas con tres comidas al día, ofrécele tres comidas con huesos durante una semana. La punta y dos huesos medios de un ala, es una cantidad de huesos aceptable para un gato (para una semana). Puedes empezar de ahí, y después ajustar. Para saber cómo ajustar, mira la caja de arena de tu gato. Si tu gato tiene heces firmes pero húmedas, entonces está consumiendo la cantidad correcta de huesos. Las heces duras, típicamente indican que estás dando demasiados huesos. Heces muy sueltas significa que estás dando muy poco hueso. Trata siempre de no superar el 10%, hacerlo puede producir estreñimiento.
Conclusión
Es claro que alimentar con huesos enteros es importante. Sus nutrientes son esenciales para la buena salud del gato. El roce que hacen al comer los huesos, ayuda a mantener los dientes y encías limpios. Eso ayuda a la salud dental, y al sistema inmune. Una boca limpia y libre de bacterias minimiza el estrés en los órganos del gato. La evidencia de los beneficios para la salud digestiva y mental del gato es convincente. Además, existe sólo un riesgo mínimo si ofreces huesos de tamaño adecuado.
Ofrecer huesos crudos no es peligroso, y no debe asustar a nadie. ¿Por qué no dejas que tu gatito libere su tigre interior, y le ofreces esta noche un trozo de carne con hueso?
————————————————————————————————————————————————————————————
Si disfrutó de esta artículo o le resultó informativa, por favor presione “Like”, “Share”, “Tweet” o escriba a mi correo electrónico, me interesa saber su opinión! Y no olvide visitar nuestras interesantes y animadas discusiones en nuestro grupo de Facebook!
Página creada el 17 de febrero de 2014.